¿Estoy pecando si tengo sexo con mi novio?
Tengo dudas sobre la sexualidad antes del matrimonio.Respuesta
La respuesta es que sí. El sexo fuera del matrimonio (técnicamente llamado fornicación) está prohibido por el sexto mandamiento, y es un pecado grave. (Catecismo 2353)Generalmente nuestra conciencia reconoce que la fornicación es un pecado. Sin embargo, las películas, la cultura y nuestros amigos a veces nos dan a entender lo contrario. Por eso te ofrezco una explicación que quizá ayude a pensar en el sexo desde una perspectiva cristiana.
El sexo es algo bueno y santo. Es el modo en que una persona nueva llega a existir. Desde esa perspectiva, es la expresión más radical de intimidad, cariño y compromiso, pues esencialmente le estás diciendo a otra persona: “quiero que haya más de ti en este mundo”. Y alguien te está diciendo a ti lo mismo: “te quiero tanto, que quiero que exista más de ti, para que el mundo sea mejor lugar, para que haya más alegría en mi vida, y para poder amar también a este otro pedacito de ti que va a existir.”
Obviamente, el sexo se puede vivir a un nivel menos intenso, pero detrás de esa menor intensidad se esconde – a veces sin una mala intención explícita – una menor generosidad y un menor respeto por tu pareja. Si el sexo no se vive en su plenitud, tarde o temprano se convierte en un intercambio de placer. Este intercambio se hace cada vez más egoísta, hasta que la otra persona termina siendo un objeto necesario pero intercambiable. Basta mirar la cultura del “hook-up”, el aumento meteórico de la pornografía, el tráfico de personas, etc.
Dios quiere que vivamos esta vida en plenitud (Juan 10, 10) y por eso nos ayuda con “reglas” que nos van mostrando el camino, aunque a veces parezcan contraculturales o incluso contraintuitivas. Recuerda que estás a una confesión de volver a empezar, y que tienes a Dios a tu lado para ganar esta batalla interior.
ME GUSTA ESTA RESPUESTA Regresar a FAQ

Juan Pablo Durán
Cuando a los 16 años pensé que podía probar que Dios no existía (o, por lo menos, que no era relevante), Él decidió presentarse de una forma personal e irrefutable. Entré al seminario después de ver cómo Dios podía utilizar alguien tan ignorante como yo para acercar a los demás a su Amor. Desde entonces, mi camino ha sido un intento de seguir a Jesús y de ser un sacerdote según su corazón para poder comunicarlo al mundo. Soy Colombiano pero Dios quiso que creciera en Tucson, Bogotá, Atlanta, Hong Kong y Tokio. Como Legionario, he vivido en Cheshire (Connecticut), Roma, Salamanca, Washington DC y Nueva York. Fui ordenado sacerdote en Roma, el 12 de diciembre de 2011.
Ask a question
Te enviaremos un email tan pronto contestes tu pregunta